Cuidar y cultivar, nuestra cultura
Durante los días 24, 25 y 26 de octubre de 2014, la Ciudad de Mondoñedo (Lugo), acogerá el IX Foro por un Mundo Rural Vivo, bajo el lema: “Bienes comunes, luchas y resistencias para la defensa de nuestros territorios. Afianzando la propuesta campesina con los jóvenes en nuestros campos”. Convocado por Plataforma Rural, en esta ocasión la organización anfitriona y coorganizadora del evento es el Sindicato Labrego Galego. Para seguir fortaleciendo nuestro movimiento por la Soberanía Alimentaria, las gentes y las organizaciones que trabajamos en favor de “Un Mundo Rural Vivo”, nos regalamos tiempo, espacio de encuentro y convivencia para algo tan importante como ilustrar el debate y la reflexión.
Este Foro nos va a permitir abordar nuevos e importantes desafíos; entre ellos, queremos destacar el papel de las movilizaciones que, en tantos pueblos, se están llevando a cabo para proteger nuestra soberanía en la gestión y control de los bienes comunes. Solo así podremos mantener nuestras agriculturas locales, esas que mantienen vivos ecosistemas y territorios, a la vez, que alimentan al mundo. Será también un buen momento para abordar dos temas centrales en nuestros paisajes humanos: por un lado, para visibilizar y conocer las aportaciones de los feminismos en la tarea de hacer tierra campesina, germen de hombres y mujeres en igualdad; y, por otro, un marco donde fortalecer la presencia de personas jóvenes en nuestros pueblos con vocación de agricultura, esa deseada re-vuelta al campo cargada de fuerza, valores e ilusión.
Durante este año la ONU celebra la “agricultura familiar” y aunque este término es muy amplio y puede incluir casi cualquier modelo de agricultura, la Vía Campesina ha decidido participar en las diferentes actividades que surgen para defender enérgicamente la Agricultura Familiar pero a la vez, que sea una agricultura campesina y agroecológica en el marco de la Soberanía Alimentaria.
Es urgente que en este Año Internacional de la Agricultura Familiar realmente se den pasos importantes y se movilicen voluntades para implementar políticas a favor de reformas agrarias integrales que permitan el acceso y control de los recursos productivos a las gentes del campo, el reconocimiento de los derechos de las mujeres campesinas, priorizar los mercados locales dedicados a alimentos (no agrocombustibles) y siempre bajo un modelo productivo agroecológico.
www.viacampesina.org
Las leyes Monsanto
En los últimos años, estamos observando una creciente presión de las multinacionales de semillas y agroquímicos para modificar y ajustar la legislación a sus conveniencias. Por la presencia repetida de Monsanto en todos estos procesos, existen campañas de resistencia contra sus proyectos en países como Colombia, Argentina, Chile, Guatemala y de alguna manera también en España. Carlos Vicente, miembro de GRAIN y de nuestro consejo editor, afirma que este tipo de leyes “implican, patentar toda nuestra biodiversidad, que el agricultor le pague regalías a Monsanto o Syngenta por su uso y además la prohibición de guardar semillas. Se pretende aplicar derechos de autor sobre la riqueza biológica que hasta ahora ha sido de dominio público. Pero además, otorga facultades policiales que permitirían, en caso de infracciones a los derechos de estas corporaciones, allanamiento de sembrados, secuestro de mercadería o de medios de trabajo propios de la agricultura”.
En el Estado español, según la Red de Semillas “la normativa de semillas vigente y sus diferentes trasposiciones, han ido encaminadas a proteger de la biodiversidad cultivada en detrimento de la conservación del patrimonio genético agrícola común y a establecer trabas a las iniciativas de uso e intercambio de variedades en peligro de erosión genética, en vez de facilitar su cultivo con un marco normativo más amable”. Por todo ello es importante apoyar las iniciativas que en cada país están surgiendo de la mano de las organizaciones de La Vía Campesina para defender el patrimonio común de las semillas.
La ONU examina las políticas de igualdad en España
La Convención para la Eliminación de toda forma de Discriminación de la Mujer (CEDAW) fue firmada por 187 países y es evaluada cada 5 años por un Comité de expertas independientes de la ONU. Para ello se toma en cuenta el Informe de los gobiernos y los ‘Informes Sombra’ de sus ONGs. El 7º informe del Gobierno de España y el de la Plataforma CEDAW Sombra de 250 organizaciones feministas y sociales sobre el periodo 2008-2013, se verán en Ginebra en noviembre 2014 y junio 2015.
En el Estado español, el Informe de las ONGs denuncia, entre otras cosas, el impacto de género de los recortes en sanidad, educación, pensiones y atención a la dependencia, y que el Estado central ha recortado su presupuesto en igualdad un 49%. Mientras han aumentado un 18% las mujeres asesinadas, así como las violaciones impunes y las declaraciones que las justifican, que las organizaciones feministas exigen combatir retomando la educación para la igualdad suprimida por la LOMCE.
Los usos comunales son una forma usual, exitosa y extendida de gobernanza de nuestro Patrimonio Natural y Cultural que se encuentran ante un momento histórico crítico. ‘Iniciativa Comunales’ es un grupo de trabajo formado por organizaciones que representan comunidades que gestionan recursos y territorios de forma comunal en el Estado español; personas de la academia que estudian estas formas de gobernanza, y ONG que trabajan por su reconocimiento y defensa. Su objetivo es trabajar por darles valor y defenderlas, potenciando sus tres pilares: Comunidad, Gobernanza y Conservación de la Naturaleza. Se basan para ello en la participación de base, el empoderamiento de las comunidades y el enfoque participativo.
Som lo que Sembrem lanzó en Abril de 2012 una campaña contra el uso del glifosato en toda Catalunya. La evidencia de que este herbicida es una de las sustancias químicas contaminantes más invasivas en nuestro entorno, y la amenaza de que la Comisión Europea pudiera aprobar variedades de transgénicos tolerantes a este herbicida, animó a difundir a la sociedad esta realidad.
La campaña llama a participar a la ciudadanía registrando en sus ayuntamientos instancias en las que se ofrece información al respecto pero sobretodo se solicitan datos sobre el uso de plaguicidas y herbicidas en el municipio, especialmente en jardinería. La campaña ha generado mucha actividad y, a partir de las solicitudes de muchos ayuntamientos de cómo ‘trabajar sin glifosato’, se organizó un curso de jardinería municipal adaptada al medio en el que participó personal técnico muncipal de todo el país.
Merece la pena destacar, para generar movilización al respecto, que ADIF invierte más de 6 millones de euros al año en limpiar las vías del tren de alta velocidad en España, con sus ‘trenes herbicidas’. Un tren que, mientras recorre la telaraña del tejido férreo, fumiga con muy poco control. ¿No hay otra fórmula que la de envenenar?
Un grupo de ingenieros ha creado una fantástica web para que, de forma colectiva, se vaya conformando un inventario visual del cambio de uso del suelo en el territorio español a lo largo de los últimos 15 años. Con alrededor de más de 500 entradas, la web, hecha a base de superponer la fotografía actual y previa a la intervención, muestra cómo ha evolucionado el urbanismo de pueblos y campos para dejar paso a polígonos industriales, puertos o autovías. Una web sin mensaje explícito –sólo hay fotografías– que sin embargo deja una idea muy clara en el visitante. Si una imagen vale más que mil palabras, dos y combinadas multiplican su efecto.
Como ejemplo os dejamos Serres, en A Coruña, antes, 2003 y después, 2009.