Almudena Hernando
Reseña de Antes del futuro. Fantasía y miedo en el capitalismo, de Rubén Uceda (Cambium Comic, 2023)
En mi infancia de los años 60, el cómic (llamado tebeo en aquel entonces por el éxito de la revista TBO), consistía en un género literario menor, dedicado básicamente a entretener a un público infantil, alejado ya de la rigidez conservadora y burguesa que lo había caracterizado en sus comienzos a principios de siglo. Más tarde, a finales de los 70 (El Capitán Trueno, El Corsario de Hierro) y especialmente en los 80 (Los Vengadores), el cómic experimentó un auge notable al ampliar su temática para dirigirse a un público más adolescente, masculino en general, fascinado con sus temáticas heroicas, guerreras y de acción trepidante. El cómic se convertía así en un mecanismo más del dispositivo (en términos de Foucault) que ayudaba a socializar a las nuevas generaciones en esa ideología patriarcal que comenzaba a verse amenazada por el creciente acceso de las mujeres a la educación superior, reforzando los valores masculinos asociados a la individualidad, la violencia como modo de resolución de conflictos o la acción acelerada como ideal de vida.
Sin embargo, poco a poco, en la década de los 80, empezó a abrirse una brecha en esta trayectoria y aparecieron cómics para adultos cuya temática «alternativa» se caracterizaría, precisamente, por poner en cuestión esos fundamentos del orden social. Aunque comenzaron siendo excepcionales, experimentaron un lento crecimiento en los años 90 (Joe Sacco publicó, de forma serializada, su obra Palestina: en la franja de Gaza, entre 1993 y 1995) y vivieron una creciente difusión a partir del cambio de siglo (Persépolis, de Marjane Satrapi, se publicó en cuatro tomos entre 2000 y 2003). Pero fue entre 2010 y 2020 cuando la crítica social encontró en esta fórmula una de sus vías de expresión y es dentro de este marco creativo, asociado a una clara conciencia social, donde se enmarca la obra de Rubén Uceda.
Desde que en 2012 publicó El decapital. Tratado sobre el divino consumo, Rubén Uceda no ha parado de crear historias gráficas que siempre plantean una reflexión sobre acontecimientos que determinaron el presente —como El corazón del sueño: Verano y otoño de 1936 (2014) o Atado y bien atado. La transición golpe a golpe (2018)—, o sobre el destructivo y extractivista modo de vida que caracteriza el presente y amenaza el futuro —como el ya citado El decapital o La huerta y el origen de las cosas (2020) y el muy reciente Antes del futuro. Fantasía y miedo en el capitalismo (2023), cuyo comentario es el objeto de estas breves líneas.
Podría resumir mis comentarios en tres ámbitos:
- Estético. A quienes tengan interés en el cómic, les interesará este libro, aunque solo sea por la creatividad y el dominio gráfico que demuestra. Especialmente llamativa me resultó la capacidad para la perspectiva y para la creación de atmósferas, que consigue situarnos en el marco emocional que cada escena requiere: optimista y relajado en las escenas rurales o campestres y pesimista y estresante al retratar la ciudad o las ensoñaciones de un futuro amenazante.
- Narrativo. El libro cuenta una historia en la que se van entremezclando un relato ficcional y algunas reflexiones. Todo comienza cuando Teo, profesor de Tecnología, es contratado para lo que él creía que sería una conferencia, pero que en realidad es una reunión con 5 de los mayores capitalistas de Hedge Funds, que quieren asesorarse sobre cómo podrán salvaguardarse, ellos y sus capitales, cuando llegue el «acontecimiento», eufemismo que hace referencia al colapso de la civilización, planteando así el tema director de toda la obra. Teo tiene una pareja, Mar, que decide irse a vivir a un pueblo. Aunque precaria, la vida allí es ideal, pero Mar sufre constantes pesadillas y ensoñaciones apocalípticas.
- Reflexivo. En este punto del relato, el texto comienza a trufarse con reflexiones históricas, filosóficas y científicas, para las que Rubén Uceda ha recurrido a distintas fuentes publicadas de autorías nombradas en un listado al final del libro. El autor defiende la necesidad ética y política de dejar de ser «espectadores», y de implicarnos en la transformación de nuestro presente si queremos construir un futuro habitable. No es suficiente observar y criticar el abismo al que nos asomamos, sino que, una vez comprendida la amenaza, resulta necesario transformar la forma de vida de cada cual, porque solo la suma de esas transformaciones generará el cambio social. Lo personal es político, como tan claramente definió Kate Millet hace muchos años.
Con el objetivo de impulsar el cambio de actitud necesario para la transformación social, Uceda va mostrando, a través de acciones muy concretas de sus personajes, en qué consiste una relación de igualdad que vaya más allá de una defensa teórica del feminismo, en qué podría consistir una forma de vida alternativa al individualismo capitalista, cómo puede cada cual ayudar a divulgar la información de que dispone sobre las amenazas ecosistémicas que se ciernen sobre el planeta, etc.
De esta manera, Antes del futuro va componiendo un tejido coherente, entretenido a la vez que reflexivo y profundo. Es un cómic maravillosamente trabajado, pero también es mucho más: es una propuesta que nos anima a tomar conciencia de los riesgos que corremos si no cambiamos modos cotidianos de relación con lo que nos rodea, enlazando así con todas esas corrientes actuales que persiguen poner «la vida en el centro», reivindicar la empatía y la solidaridad (ecofeminista) y ayudar a neutralizar la dinámica destructiva, extractivista, basada en la injusticia y la desigualdad, que caracteriza cada vez más a las sociedades occidentales.
Almudena Hernando
Arqueóloga y profesora en la Universidad Complutense de Madrid