Un informe de GRAIN

En el año 2021, Barcelona será la Capital Mundial de la Alimentación Sostenible, con los objetivos de promover dietas saludables, plantear la alimentación sostenible a través del comercio y la agricultura de proximidad, y remarcar sus bondades como estrategia para luchar contra el cambio climático. La capitalidad parece una buena oportunidad para desafiar al modelo de agricultura industrial y alimentación globalizada.

En este marco, siendo España uno de los líderes en la producción intensiva de cerdos y aves de corral, con Catalunya a la cabeza en términos productivos y comerciales, es pertinente preguntarnos qué papel desempeña Barcelona en este modelo agroindustrial tan perjudicial para el clima y tan dañino para la soberanía alimentaria de muchos pueblos. Para responder a esta pregunta, el informe se centra concretamente en el tráfico de la soja —elemento clave en estas producciones intensivas— a través de una de las principales infraestructuras logísticas de la ciudad: el Port de Barcelona.

En primer lugar, se identifican los principales usos de la soja, se analiza la relación de los mecanismos de comercio internacional entre la UE y EE. UU. y entre la UE y el Mercosur (Brasil y Argentina), y se describen sus impactos negativos a través de emisiones de CO₂ a raíz de la deforestación y los cambios de usos del suelo, especialmente en Brasil.

En segundo lugar, se revisa el papel del Port de Barcelona y sus estrategias para mantener e incrementar el tránsito comercial que va de la mano del mecanismo de concesión que refuerza su relación con multinacionales como Cargill y Bunge, presentes en sus muelles.

En tercer lugar, se examina la cadena de suministro que recorre la soja desde las importaciones por el Port de Barcelona, pasando por la industria del pienso, su relación con la industria alimentaria catalana y hasta el consumo en los hogares de Catalunya.

Finalmente, se analiza la posible relación futura entre la soja y la industria del biocombustible, que puede representar una nueva oportunidad para las corporaciones instaladas en el puerto y que, al promover el aumento de las importaciones, incitaría al incremento de los impactos negativos.